Al llegar al año 2023, las mujeres se encontraron una vez más con la frustración de haber sido relegadas en sus trabajos y no haber logrado ascensos. Según una encuesta de ManpowerGroup, el 60% de ellas está considerando dejar sus puestos actuales en busca de una mayor flexibilidad laboral. Esto se debe a que por cada 100 hombres que fueron promovidos a puestos directivos, solo 87 mujeres alcanzaron esa misma posición. Esta falta de oportunidades de crecimiento no solo afecta a las mujeres, sino también a las organizaciones, ya que puede llevar a la desmotivación de los mandos medios, quienes son clave para impulsar la productividad.
Además, la falta de diversidad de género en los puestos gerenciales va en contra de las recomendaciones de promover la diversidad en los equipos de liderazgo, lo que puede afectar la toma de decisiones y la rentabilidad de la empresa. A pesar de que un tercio de las organizaciones encuestadas afirmaron tener iniciativas de diversidad, equidad, inclusión y pertenencia, la mayoría admitió que el progreso hacia estos objetivos ha sido lento o escaso. También se destacó que no hubo avances significativos en términos de equidad salarial, ya que solo la mitad de las empresas aseguraron tener iniciativas en marcha para abordar este tema.
Luis Guastini, director general de ManpowerGroup Argentina y director de Talent Solutions para Latinoamérica, enfatizó la importancia de prestar atención a las nuevas necesidades de las mujeres en un contexto de escasez de talento y promover iniciativas que fomenten la diversidad y la igualdad de oportunidades. En este sentido, señaló que las empresas deben reconocer el valor de la diversidad de género y tomar medidas concretas para cerrar la brecha, utilizando herramientas como la tecnología, el liderazgo inclusivo y políticas flexibles.
La falta de una integración plena de las mujeres en el mercado laboral afecta los cambios importantes que están ocurriendo en la estructura y el entorno de trabajo. Según un informe de la Oficina Nacional de Investigación Económica, la vinculación masculina en las empresas es una de las causas principales de la brecha de género en los ascensos, que representa una ventaja del 40% para los hombres.
Los esfuerzos por mejorar la igualdad de género en el lugar de trabajo también varían según el tipo de función. En los roles administrativos y operativos, la inclusión es mayor, mientras que en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM), la representación femenina es menor. Esto también se refleja en la falta de mujeres en puestos de alta dirección.
A pesar de los avances, un informe de la Organización Internacional del Trabajo destaca que las diferencias de género en el empleo no han mejorado significativamente en los últimos 20 años. Para lograr una igualdad real, es necesario acabar con leyes discriminatorias y cambiar los estereotipos de género arraigados en la sociedad.
En Argentina, el Programa Nacional para la Igualdad de Géneros en el Trabajo, el Empleo y la Producción, conocido como "Igualar", busca reducir las brechas y segregaciones de género en el mercado laboral. Dirigido a diversos sectores, su objetivo general es reducir la desigualdad estructural en el mundo del trabajo para mujeres y personas LGBTI+.
En un contexto global de escasez de talento, es fundamental para las empresas atraer y retener una fuerza laboral diversa. Las mujeres desempeñarán un papel cada vez más importante en el futuro del trabajo, por lo que se identifican cinco oportunidades clave para involucrarlas.